Depresión o trauma postparto

El Sufrimiento del Parto Traumático

Experiencia Traumática del Parto

Un porcentaje elevado de partos en nuestro país son traumáticos para las mujeres. Esto se debe a factores fisiológicos, psicológicos, o a un entorno percibido como difícil o hostil. Como resultado, muchas mujeres desarrollan un Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT), caracterizado por una profunda inquietud y malestar en relación con ellas mismas, su bebé y su entorno. Es muy importante abordar y tratar el trauma del parto para mejorar la calidad de vida de las mujeres afectadas.

Impacto del Parto Traumático

Sheila Kitzinger, creadora de la red de apoyo británica ‘Birth Crisis’, describe el impacto del parto traumático. Las mujeres se sienten impotentes y sin control durante un evento crucial en sus vidas. Inicialmente pueden sentirse aliviadas de que todo haya terminado, pero luego experimentan una mezcla de gratitud y sensación de haber sido violadas.

Síntomas del TEPT Postparto

Las escenas del parto se repiten en sus mentes como un vídeo continuo. Sufren pesadillas y recuerdos del trauma. A menudo les dicen que “esperaban otra cosa”, lo que agrava su sufrimiento. Estas mujeres pierden confianza en sus cuerpos y la lactancia se convierte en una lucha.

Casos de Tratamiento de Alta Tecnología

El artículo describe casos graves de mujeres traumatizadas por tratamientos de “alta tecnología” como oxitocina, episiotomía y monitorización fetal. Sin embargo, algunas mujeres experimentan síntomas similares incluso en circunstancias favorables. Esto puede deberse a su relación con su cuerpo o a sus expectativas no cumplidas.

Sentimientos de Fracaso y Acompañamiento

El sentimiento de fracaso como madre y mujer al no tener el parto soñado puede ser devastador. También puede influir la falta de apoyo de la pareja, incrementando el sentimiento de vulnerabilidad.

Calidad de Vida Afectada

Las víctimas de acontecimientos traumáticos sufren mucho y su calidad de vida diaria se ve gravemente afectada. Especialmente, son vulnerables a los recordatorios del evento traumático en su entorno.

Conclusión

El parto traumático puede dejar profundas cicatrices emocionales. Es esencial reconocer y abordar estos problemas para mejorar la calidad de vida de las mujeres afectadas.